Las mujeres más guapas del mundo están en
Se las regaña, aconseja y ordena, todo un mundo de señalamientos a seguir. La contradicción extrema: el lenguaje que silencia; esto es, a través del habla se induce al mutismo. Especialmente se apunta a la ridiculización del lenguaje intragenérico en los pocos espacios que las mujeres tienen -o tenían hasta hace poco, ya que por los cambios tecnológicos y las formas de vida en determinadas sociedades esto ya no es así- para encontrarse y comunicarse. El consenso de opiniones intergenérico en este sentido nos apunta a la hegemonía del modelo cultural gramsciano, en donde los dominados comparten con los dominadores, hasta cierto punto, las creencias y valores socialmente establecidos Gramsci Como decíamos, esto queda muy patente, al poner los refranes en boca de las mujeres, la descripción censuradora o impugnadora de su propio comportamiento lingüístico, asumido al parecer y reproducido, como agentes sociales activas que son. Desde una posición que se columpia entre el menosprecio y el miedo, el comportamiento lingüístico de las mujeres ha sido duramente sojuzgado y sancionado por los mensajes orales de la cultura popular y concretamente, como estamos viendo, por el discurso lapidario del refranero. Las mujeres han estado tradicionalmente olvidadas, excluidas y cuando se las tiene en cuenta es para callarlas, censurarlas, insultarlas o ridiculizarlas.
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CNN -- Escondidos en los pasillos del Fashion Institute of Technology en Noticia York hay textiles históricos y prendas glamorosas, muchas de las cuales guardan secretos de épocas pasadas. La generalidad de los visitantes del museo suelen hacer la misma pregunta, dijo Emma McClendon, comisaria de vestuario del galería. LEE: El precio de la gracia Es parte de nuestra identidad como personas, indicó.